Que no puede una distraerse ni un minuto. Dominado el contouring y tratando de descifrar eso del strobing, llega el baking. Una nueva técnica de maquillaje que es trending topic en Instagram cuyo nombre solo habíamos escuchado asociado a pasteles y magdalenas.

No lo habíamos escuchado ni nosotros, ni tampoco los maquilladores españoles, que se quedan con cara de paisaje con fuente cuando les planteamos la idoneidad o no de esta posibilidad. Supuestamente, se lleva a cabo para conseguir una piel libre de imperfecciones y arrugas y su mayor defensora es… [redoble de tambores] ¡Kim Kardashian! Aunque se llame ‘cocer’ (en inglés), realmente hace referencia a la acepción ‘dejar que la pintura seque y se asiente’ que usan los pintores de brocha gorda.

Kim Kardashian y su impecable maquillaje cortesía del 'baking' (o de dedicarse 24 horas al día a su cuidado y ornamentación, que también es posible). © Cordon Press
Kim Kardashian y su impecable maquillaje a causa del ‘baking’ (o de dedicarse 24 horas al día a su cuidado y ornamentación, que también es posible). © Cordon Press

Pero volvamos a Instagram y a la locura Kardashian. El baking es una técnica de maquillaje que sostiene que, si dejas aplicado el corrector en tu cara durante 20 minutos, facilitas el que tu piel, con el calor, lo vaya asimilando y absorbiendo. ¿El objetivo? Conseguir un resultado mucho más cubriente y perfecto que si lo aplicas con los dedos en un pis-pas desde el tarro directamente a la piel.

Suena un poco increíble y, como ya te imaginas, los maquilladores profesionales se parten. Roberto Siguero, National Make Up Artist de Lancôme, no entiende la necesidad: “Lejos de ser una idea moderna, me parece algo arcaico. Los correctores actuales tienen unas texturas muy conseguidas, que se funden con la piel, y no hay ninguna necesidad de dejarlos actuar. Además, el maquillador [o la que se vaya a maquillar] ya calienta el producto con las yemas de los dedos antes de aplicarlo sobre la piel, por lo que la textura ya está bastante trabajada y no se cuartea”. Parece claro, entonces: esta técnica no tiene muchas ventajas sobre la forma tradicional de usar correctores e iluminadores.

La youtuber Heidi Hamoud se ha encargado de popularizar esta técnica. © Instagram / @HeidiHamoud
La youtuber Heidi Hamoud se ha encargado de popularizar esta técnica. © Instagram / @HeidiHamoud

¿#Baking para dummies?

Al haber nacido en el seno territorial de las youtubers, nos preguntamos si quizá pueda ser una técnica ideada para no-iniciadas. “Al contrario”, defiende Siguero. “Cuanto menos experta sea la mujer que se quiere maquillar, menos debe dejar un producto en la piel veinte minutos; esto incomoda mucho a la hora de aplicar el resto de productos”, sostiene.

O sea, que aunque es cierto que el corrector debe estar bien emulsionado y aplicarse sobre la piel a toquecitos para que ésta lo absorba y se fije bien, no hace falta cocerse la cara con él con 20 minutos de antelación. Es decir, no intente esto en su casa. Pese a todo, la idea ya ha prendido por redes sociales varias y los tutoriales con el hastag #baking se cuentan ya por miles. ¿Tienes curiosidad sobre cómo lo llevan a cabo?

He aquí un ejemplo de @heidihamoud: