Moda
Siempre decimos que la belleza influye en el estado de ánimo. Pero no me malinterpreten… que las guapas también lloran. Me refiero a que una buena piel, un maquillaje acertado o unas manos bien arregladas pueden darte un boost de autoestima en el día más gris. Lo mismo pasa con las fragancias. Algunas te hacen sentir tranquila mientras que otras te invitan a salir y triunfar. Desde que el mundo es mundo se ha tenido al perfume como un arma para mover la voluntad de una misma y de los demás. Más segura, más sexy, más poderosa, más serena. Elige la nota adecuada y prepárate a disfrutar.
En uno de los estudios más importantes que se han realizado sobre el perfume, el de las químicas Silvia Salesa Frochoso y Eva María Carral Mahia de 2004, se afirma que el perfume puede influir en el humor y el carácter de las personas. Del que lo lleva y del que lo percibe en otro: «Esta capacidad ha sido descubierta y certificada por la comunidad científica», afirman estas expertas. Según este estudio, existe una lista de olores cuya cualidades físicas han sido constatadas.
Son éstas:
Ámbar: Sus propiedades afrodisíacas son muy conocidas. Aporta resistencia, audacia y resolución.
Albahaca: Tonifica y estimula el organismo de forma tan eficaz como un café, pero sin sus inconvenientes.
Bergamota: Presente en muchas colonias de bebé, es capaz de aplacar la ansiedad, aliviar el estrés y dar seguridad.
Limón: Es, de los cítricos, el más energético. Contribuye a tener reflejos rápidos y precisos.
Jazmín: Proporciona sensación de seguridad en una misma, aporta autoridad a quien lo lleva y transmite audacia.
Lavanda: El tranquilizante por antonomasia, es capaz de ayudar a regular el sistema nervioso.
Lirio de los valles: Estimula y da viveza mental.
Narciso: Despierta las mentes perezosas y contribuyen a una mayor agudeza mental.
Naranja, mandarina y pomelo: Son tres aromas que confieren alegría y desarrollan la capacidad de comunicación.
Patchouli: Ayuda a la extroversión, a la seguridad e, incluso, a da un punto de desparpajo.
Rosa: Ayuda a calmar el mal humor y rodea a la que lo lleva de un halo de misterio.
Sándalo: Confiere seguridad en una misma y, además, es afrodisíaco y ayuda a calmar el desasosiego.
Nardo: Es el aroma sexy por naturaleza. Facilita el contacto entre personas, ayuda a desarrollar la intuición y la diplomacia.
Verbena: Despierta la simpatía y calma los nervios.
Ylang-ylang: Alegra los corazones y facilita el buen humor.
¡ATENCIÓN, TRUCO!
Para no ser demasiado invasiva con tu perfume y que cumpla su función sin cansar a tu entorno, existen formas sutiles de elaborar la estela olorosa, como vaporizar el cabello en su nacimiento, si es corto, o en las puntas, si es largo. «La ropa también puede perfumarse, aunque no de cualquier manera. Conviene vaporizar el forro de chaquetas y abrigos, así como el dobladillo de las faldas, sin olvidar los pañuelos. ¿La exquisitez suprema?, verter unas gotas de perfume en el agua del último aclarado de la ropa interior», sugieren Salesa y Carral.
¿Te hemos convencido? Elige cuál comprarás en nuestro shopping de perfumes con mensaje:
[galeria]
