Este fin de semana The New York Times publica paralizaba la web publicando un impactante artículo en el que sacaba a relucir la cara B de Harvey Weinstein, probablemente el productor más poderoso de Hollywood. Durante décadas, el señor Weinstein había acosado sexualmente a varias mujeres, entre ellas las actrices Ashely Judd y Rose McGowan. A la primera, Harvey la citó en el hotel Peninsula en Beverly Hills cuando ella estaba comenzado su carrera, la recibió en bata y le propuso darle un masaje en el cuello o que ella le observase mientras se duchaba. «¿Cómo salgo de la habitación sin enfadarle?», recuerda Ashley, que no ha dudado en compartir su testimonio para destapar a Weinstein.

En el caso de McGowan, ella lo denunció y finalmente llegaron a un acuerdo económico (unos 100.000 dólares por su silencio), allá por 1997. Un contrato de confidencialidad al que le siguieron muchos otros, siendo el último el firmado por la modelo italiana Ambra Battilana en 2015.

¿FIN?

Pues no. Afortunadamente, aquí no acaba una historia que hace años hubiese sido relegada a un segundo plano. En un giro inesperado de los acontecimientos, Hollywood no ha dejado que el caso Harvey Weinstein pase de puntillas por la prensa ni que el protagonista del mismo se vaya de rositas. La meca del cine se ha posicionado fuertemente en contra del productor, dejando claro que este tipo de comportamientos son inaceptables en una industria en la que la mujer juega siempre con desventaja. Y eso que Harvey entonó el mea culpa al día siguiente en una carta que no llegó al corazón de nadie: «Sé que tengo problemas y estoy trabajando en ellos. Pido perdón por mis pasados actos y me tomo un descanso de mis actividades profesionales para recuperarme». De nada le valió. El productor fue despedido horas después de su propia empresa, The Weinstein Company, de la que era co-presidente junto a su hermano.

Jennifer Lawrence junto a Harvey Weinstein en la fiesta posterior a los Oscar 2013, donde ella se llevó el premio a Mejor Actriz. © Getty Images

No es industria para acosadores

Un mensaje alto y claro que retumba con fuerza en las colinas de Hollywood. La meca del cine ha destronado a su Dios. Y no lo digo yo. Meryl Streep lo definió así hace unos años al recoger uno de sus muchos galardones y no exageraba en absoluto. Harvey Weinstein está detrás de los mayores éxitos cinematográficos de las últimas décadas habiendo logrado con sus proyectos más de 80 Oscar y 350 nominaciones. No solo eso. El productor dirigió las campañas de Gwyneth Paltrow, Penelope Cruz, Jennifer Lawrence, Kate Winslet y de la propia Meryl, entre muchas otras, para ganar sus preciados Oscar.

Sin embargo, la industria ha dicho basta en un movimiento que nadie esperaba. “Hasta ahora las víctimas habíamos hablado de esto entre nosotras, pero es hora de que lo hagamos público», aseguraba Ashley Judd, mientras que Rose McGowan hacía un llamamiento en Twitter: «Mujeres de Hollywood, ¿dónde estáis? Vuestro silencio es ensordecedor». Un guante que han recogido quienes en el pasado posaban sonrientes junto a Weinstein.

Harvey Weistein ha movido los hilos de Hollywood durante años. © Getty Images
  • Kate Winslet: «Su comportamiento es, sin ninguna duda, inadecuado. Tuve la esperanza de que todo fuesen rumores, pero creo que me comporté de manera muy naif al respecto».
  • Meryl Streep: «Las desagradables noticias sobre Harvey Weinstein nos han horrorizado a todos los que alguna vez trabajamos con él. Además, ha echado por tierra todas las buenas causas para las que colaboraba».
  • Jennifer Lawrence: «Estoy completamente consternada por las noticias sobre Harvey Weinstein. Este tipo de abuso es inexcusable y absolutamente reprobable».
  • Glenn Close: «Estoy muy enfadada no solo con él sino con la conspiración de silencio que había a su alrededor. También rechazo esa cultura de los casting couch [casting de sofá, por definir finamente el pasar por la cama para conseguir un papel] que es una realidad para muchas mujeres de Hollywood. La presión y las horribles expectativas a las que nos somete esta industria debe desaparecer».
  • Judi Dench: «No puede decir que mi carrera no haya estado patrocinada en muchas ocasiones por Harvey Weinstein, pero desconocía sus abusos con los que estoy horrorizada. Además, me solidarizo con todas aquellas mujeres que los han sufrido y les ofrezco todo mi apoyo para que hablen sin miedo».
  • Romola Garai: «Como muchas otras mujeres en esta industria, yo también tuve una ‘audición’ con Harvey Weinstein. Llegué a la habitación de su hotel y él me abrió en bata. Yo solo tenía 18 años y me sentí violada por su comportamiento».
  • Lena Dunham: «Es fácil pensar que The Weinstein Company ha actuado rápido y bien (por haberlo despedido), pero realmente esta compañía ha sabido siempre lo que ocurría».
  • Susan Sarandon: «Enorme respeto para Ashley Judd y todas las mujeres que han roto su silencio en contra de Harvey Weinstein. Valientes».
  • Julianne Moore: «Hablar de abusos sexuales y coacción da miedo y las mujeres no tenemos nada que ganar en este asunto. Gracias a la valentía de Ashley Judd, Rose McGowan y otras, podremos seguir avanzado en este sentido».
  • Jessica Chastain: «Yo fui avisada desde un primer momento. Las historias sobre esto estaban por todas partes. Negarlas es crear un ambiente en el que volverán a repetirse».

Aunque no solo las mujeres han alzado sus voces. Algunos hombres, entre los que destacan dos por su relevancia en la industria, se han posicionado a su lado para frenar estos abusos de poder por parte del género masculino.

  • George Clooney: «Lo que ha hecho es indefendible y no puede admitirse. Le conozco desde hace 20 años. Hemos acudido a comidas juntos, hemos estado en rodajes, hemos discutido… Pero nunca he observado ningún tipo de comportamiento inapropiado. Sin embargo, estas acusaciones son muy graves y cualquiera que no las condene se convierte en cómplice de lo que hizo».
  • Mark Ruffalo: «Para ser sinceros, lo que Harvey Weinstein hizo fue un horrible y asqueroso abuso de poder. Espero que con esto empiece el principio del fin de estos terribles abusos».

¿Un nuevo comienzo para las mujeres en Hollywood?

Jessica Chastain y Lena Dunham han colocado sobre la mesa uno de los puntos más controvertidos de todo el asunto: «Esto ya se sabía», pero no se han tomado medidas hasta que no ha explotado. Ahora solo queda por ver si el efecto-Weinstein removerá conciencias dentro y fuera de una industria machista por excelencia. El primer paso ya se han dado.