Como bien dijo Peter Parker en Spiderman, «un gran poder conlleva una gran responsabilidad». En el caso de la familia real inglesa, esa responsabilidad recae en seguir el protocolo al pie de la letra. Da igual quién te aborde en la calle o lo que te diga, tú solo tienes que sonreír y contestar de la forma más agradable posible. Aunque todo el mundo diga que te has peleado con tu cuñada y que ni siguiera te van a tener en cuenta para ser la madrina de tu futuro sobrino (o sobrina)…

Así le pasó a Kate Middleton durante una visita a la Universidad de Leicester, acompañada del príncipe Guillermo, donde se rendía homenaje a los cinco fallecidos en un accidente en helicóptero la semana pasada. A la salida de dicho complejo, la gente se arremolinó para saludar a los duques de Cambridge y no faltó esa persona «espontánea» que le preguntó a la duquesa sobre el embarazo de Meghan Markle

¿Cómo reaccionó la duquesa? Con la templanza y el saber estar propios de una royal. «Es una época muy especial para tener niños pequeños y un primo para George y Charlotte, así como para Louis, va a ser algo muy especial», contestó sin pensarlo y con una sonrisa de oreja a oreja.

Que sí, que sabemos que es parte de su trabajo saber reaccionar ante estas situaciones pero, siendo sinceras, la verdad es que con esa reacción empezamos a dudar un poco —mucho— que esa historia de lucha de egos entre ambas duquesas sea una realidad… ¿qué te crees tú?

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