Moda
Cuando tu mujer te organiza una fiesta sorpresa cerrando la pista de baloncesto más importante del mundo para que juegues con tus amigotes, hay que saber estar a la altura y devolver el regalo a lo grande. Por eso, para celebrar el 35 cumpleaños de Kim Kardashian, su marido, Kanye West, no se anduvo con tonterías.
Resulta que la Kardashian más mediática está teniendo un embarazo complicado; no es fácil amortizar los trapitos ajustados que tienes en el armario cuando estás a punto de explotar dar a luz, y eso la señora West no lo está llevando del todo bien. Por eso, durante el día de su cumpleaños, Kanye quiso que todos sus familiares y amigos cercanos empatizaran con la causa y sintieran lo que es llevar un bombo a cuestas organizando un ‘pregnant birthday‘ (cumpleaños de embarazada) en el que, además de proyectar en exclusiva la película de Steve Jobs (en un cine alquilado solo para ellos, repleto de flores), los allí presentes tendrían que plantarse la barriguita falsa que se les daba a la entrada. Creepy. Muy creepy.
“¡Mi marido nunca deja de sorprenderme! Ha alquilado todo un cine para proyectar la nueva de Steve Jobs (es muuuy buena, por cierto) y ha invitado a mis amigos y familiares a que vinieran vestidos con su mejor ‘look de Kim embarazada’ (las barrigas falsas se las daban al llegar). No estoy muy segura de si lo hizo para hacerme sentir menos gigante, o simplemente por buscar una temática divertida, pero me encantó y lo pasé genial. ¡Me sentí muy cómoda comiendo churros con todo un grupo de mujeres embarazadas!”, escribió Kim junto a la imagen de su tarta blanca, rodeada de rosas del mismo color.
A la fiesta no faltaron su madre, Kris Jenner, ni sus hermanas, Kylie Jenner y Kourtney Kardashian, quienes lucieron, como el resto, bombo de embarazada para hacer sentir mejor a la cumpleañera. De lo que no hemos encontrado documentos gráficos a lo largo y ancho de Instagram es de Kanye embarazado también… Porque la norma se aplicaría a todos los invitados, ¿no? ¡Eso sí que nos gustaría verlo!
