Work, work, work, work, work, work… Esa parece ser (además de su gran temazo) su filosofía de vida. Y es que Rihanna está predestinada a petarlo alcanzar el éxito con cada cosa que hace: diseñadora de moda, cantante, empresaria y ahora también premiada por su labor humanitaria por la Fundación Harvard. ¿Alguien da más? Cuidado Queen B, porque puede que tu trono se esté tambaleando.

Sí, tú ríete pero como te descuides te quita hasta la corona.

El prestigioso galardón, que en el pasado recibieron personalidades como el ex secretario de Naciones Unidas Ban Ki-Moon o la defensora de los derechos de las mujeres Malala Yousafzai (ahí es nada), le ha sido otorgado, no por su trayectoria académica sino como reconocimiento a su excelente labor solidaria al frente de diversas organizaciones. En concreto, por su Fundación Clara y Lionel (en honor a sus abuelos), con la que ayuda y financia proyectos enfocados a la salud, la educación, el arte y la cultura, y por el centro de última generación dedicado a la oncología y la medicina nuclear para diagnosticar y tratar el cáncer de mama en el Hospital Queen Elizabeth en Barbados que mandó construir de manera caritativa.

Riri recogiendo su premio. © Getty Images

La artista se ha convertido así en la primera mujer cantante en recibir el premio Humanitario del año de la Universidad de Harvard. Un galardón que se le entregó ayer, y que recogió ella personalmente. Tras ello, se marcó un speech de casi 10 minutos en el que, además de agradecer emocionada este reconocimiento y animar a los presentes a participar en obras solidarias, fue más Rihanna que nunca. De hecho, empezó diciendo «Bueno, ya he llegado a Harvard» seguido de una mueca chulesca. Ella en su línea…

Que nos encanta, por cierto.

Para la ocasión apostó por un look working girl ‘a la Rihanna’; un vestido de estilo diplomático de la colección otoño-invierno 2017/18 de Monse con escote en barco y una abertura lateral que dejaba a la vista sus piernas. Quizá un diseño un tanto atrevido para una institución como Harvard pero con el que brilló como un diamante. Perdón, tenía que hacerlo.

La cantante mientras daba su discurso. © Getty Images

«No hace falta ser rico para ayudar a alguien. Ni tampoco famoso. Ni siquiera tienes que ser un graduado universitario. Quiero decir, ojalá yo lo fuera, no quiero decir… ya sabéis [la multitud se ríe]. Especialmente hoy [más risas]. Es cierto, puede que algún día vuelva pero todo está bien,» dijo la cantante a lo largo de su intervención ganándose al público y su ovación. Pero por si quieres verlo completo, aquí lo tienes.

https://www.youtube.com/watch?v=JNDMkP6X6jY