Moda
El pasado 4 de febrero, Taylor Swift daba un concierto con motivo de la Super Bowl en Texas (Houston) y desaparecía de nuestras vidas. Escasas actualizaciones de sus redes sociales (y todas correspondían a pantallazos de canciones que estaba escuchando), nada de salidas nocturnas, cero apariciones en entregas de premios musicales y ni siquiera pisó Nueva York para acudir a la gala Met con sus amigas. ¿Qué estaba pasando?
Mientras muchos apuntaban a que Taylor se había recluido en casa para trabajar en su próximo álbum (¡yuju!), hay quienes pensaban que la cantante y su pandilla no atravesaban su mejor momento. ¿El motivo? El romance de Selena Gomez con The Weeknd, exnovio de Bella Hadid, hermana de Gigi Hadid y amiga de Taylor. El problema, obviamente, era que Selena y Gigi eran amigas de Swift y esto ponía a la cantante en una situación un pelín complicada.
Sin embargo, parece ser que no hay drama. O por lo menos no entre Gigi (hermana de Bella, sí hace falta un croquis) y Taylor. La modelo es la portada del nuevo número de la edición americana de Harper’s Bazaar y la publicación ha conseguido que Swift les mandara un e-mail dedicándole unas palabras a su best friend. Atentas porque ha escrito un texto muy cuqui: «Como amiga, Gigi es una de las primeras personas a las que acudo en busca de consejo. Ella tiene esa capacidad increíble de ver todos los lados de una situación y simplificarlos para ti. Puede ver la complejidad de la gente. Su regla número uno es tratar a la gente de la misma manera que le gustaría ser tratada. Así que es puntual en el trabajo, dice hola a todo el mundo en el set, les pregunta cómo están y les escucha. Ella es una persona única e inclusiva que ha logrado convertirse en una poderosa mujer empresaria sin comprometer nunca sus valores».
¡Madre mía! Eso es un discurso de amistad y lo demás son tonterías. Solo una cosita, Taylor. ¿Tendrías este gesto tan bonito con Selena Gomez?
Y sí, igual la pregunta es un poquito envenenada. Sin embargo, debo decir que ninguna mujer debería discutir con otra por un hombre. No vale la pena, queridas. ¿Acaso discuten ellos por nosotras?
