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Después de siete años alejados del Zurbarán, Yoli y Cabano (o, lo que es lo mismo, Andrea Duro y Maxi Iglesias) han protagonizado un reencuentro que, tras compartirlo en sus respectivas redes sociales, ha revolucionado a las que algún día fuimos fans de Física o Química. Eso sí, por mucho que la protagonista de La catedral del mar lo intenta, parece que Maxi Iglesias no se deja conquistar.
Dejando a un lado la trama de ficción, han sido muchos los seguidores de la dupla actoral que han fantaseado con la idea de una posible relación entre Andrea Duro y Maxi Iglesias; sin embargo, nada más lejos de la realidad. Lo suyo es simplemente una buena amistad.
Eso sí, la atracción mediática suscitada por el reencuentro de los actores, nos ha servido de punto de partida para recordar lo guapo que siempre fue (y sigue siendo) nuestro querido César Cabano.
En el terreno laboral, además de otros proyectos, puedes ver a Maxi Iglesias a través de Netflix, donde acaba de estrenar la segunda parte de Ingobernable, serie que protagoniza junto a la actriz mexicana Kate del Castillo con quien, por cierto, se ha rumoreado en más de una ocasión que tiene algo más que una relación de compañeros de trabajo…
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¿Quieres la imagen de la ternura personificada? ¡La tenemos! Maxi Iglesias, sin camiseta, abrazando a un cachorrito. ¡Ya, por favor!
Si después de ver esta foto nos vas a decir que Maxi Iglesias es como el buen vino y que mejora con los años, aquí está la prueba de que, al menos desde 2015, el sex appeal del protagonista de Los protegidos ha ido in crescendo.
Y por si todas estas razones, físicas y profesionales, no fuesen suficiente, además Maxi Iglesias es un hombre preocupado por el medio ambiente y por cuidar el planeta. ¿Qué más se le puede pedir?
Foto: Getty Images