Drew Barrymore is back. Aunque he de reconocer que está algo cambiada. ¿Qué será? ¡Ah, sí! Ahora se ha apuntado al canibalismo. Fíjate tú qué cosas. ¿Nueva moda en Hollywood? Esperemos que no. Su extraña y sangrienta dieta se debe al gusto por la carne humana de Sheila, su personaje en la que será tu próxima serie de cabecera, Santa Clarita Diet.

A Sheila le gusta comer carne picada. Pero no la que tú yo conocemos. © Cortesía de Netflix

De ahí que en su visita a España para promocionar su primer trabajo en la pequeña pantalla, quisiésemos agasajarla con algo especial. Dispuestos a dejarla con la boca abierta, un nutrido grupo de periodistas y yo nos unimos al chef Ramón Freixa para crear un menú ‘caníbal’. Y vale. Puede que el cocinero catalán hiciera todo el trabajo mientras nosotros mirábamos y degustábamos. Pero lo importante es participar, ¿no?

A mí se me queman hasta los cereales. Así que mejor que estuviese Ramón.
  • Un menú del gusto de Hannibal Lecter

«La clave está en pensar qué alimentos pueden darnos sensación de estar comiendo carne humana o bebiendo su sangre», nos comenta Freixa. Vale bien. La cosa se presenta fuertecita. Para comenzar, Ramón nos deleita con el aperitivo Red Campari on the rocks. Lo realiza añadiendo zumo de naranja sanguina al Red Campari, que le da un toque mucho más rojo a la bebida. Lo remata decorándolo con dedos y dentaduras de gominola. Suculento e inquietante a partes iguales.

Y Drew se lo bebió sin rechistar. ¡Campeona! © Getty Images

Tras abrir boca con el cóctel, nos metemos en faena con el plato principal; la Santa Clarita Raw Perfect Burger. ¿Ingredientes? Mezclamos carne picada con mostaza, tabasco, pepinillo, alcaparras, una yema de huevo y un buen chorro de aceite de oliva. Cuando lo tengamos, lo ponemos sobre un pan de hamburguesa y añadimos lechuga, queso y una rodaja de tomate. ¡Listo! Además de fácil, la ventaja de cocinar una hamburguesa de carne cruda es que no manchas las sartenes. De nada.

La cara de sorpresa de Drew al ver que la carne estaba cruda no tiene precio. © Getty Images

Y como los caníbales también comen postre o eso creemos, Ramón tuvo la genial idea de hacer un capuccino de remolacha fresca. Para elaborarlo, metemos en un vaso de batidora, remolacha, frambuesas, fresas, colorante alimenticio rojo y le damos al play. Una vez que se haya creado una mezcla espesa y uniforme, la introducimos en un sifón que meteremos en la nevera durante media hora. Una vez fría, decoramos con ella una taza de café. ¿El toque final? Ponerle trozos de galletas Oreo trituradas por encima. Muero del hambre.

Y si además de bueno, te lo da de comer Ramón Freixa… ¡para qué queremos más! © Getty Images
  • Drew no es muy cocinillas

Tras confesar que le había gustado mucho el menú tan original que le habíamos preparado, la actriz nos aseguró que lo de los fogones no es lo suyo: «Cocino a diario para mis dos hijos, pero no soy muy buena, lo reconozco. Cuando vienen amigos a casa intento hacer algo fácil como ensalada y pasta«. ¡Drew es de las nuestras! Qué alivio. Además, no tuvo reparos en reconocer que su trabajo en esta serie le había hecho aprender a cuidarse y a retomar su vida normal después de su divorcio con Will Kopelman: «Esta serie me llegó en un momento en el que yo estaba pasándolo muy mal emocionalmente. Volver a trabajar me hizo querer estar más guapa y comencé a comer mejor. He perdido 10 kilos y estoy encantada».

Encantada y guapa a más no poder, también sea dicho de paso. © Getty Images

Con declaraciones así, ¡cómo no quererla! Así que ya sabes, si quieres pasar un buen rato con Drew en el personaje de Sheila en Santa Clarita Diet, no te olvides de su estreno el próximo 3 de febrero en Netflix. Avisada quedas. Ah, y el que hace de su marido en la ficción es el guaperas de Timothy Olyphant. Ya no hay excusa que valga.

¡Quién fuera Drew! © Netflix