Viajar, por lo general, es caro: en avión los billetes cada vez cuestan más (no nos engañemos, ¿qué es eso de que tengas que desembolsar 150€ para ir a Málaga? ¡¡¡A Málaga!!!), en tren y autobús puedes morir en el intento, y el AVE es un capricho que solo puedes darte de vez en cuando. Total, que solo nos queda el coche y, a no ser que tengas 1. coche (esencial, claro) y 2. cuatro amigos más con los que repartir los costes de la gasolina, la cosa te saldrá poco rentable (y, admitámoslo, será aburrido de narices).

¿Solución? Compartir vehículo, aunque sea con gente que no conoces, pero ni falta que hace: esta es la propuesta que, tomando como idea la iniciativa alemana Mitfahrengelenheit, han seguido en los últimos años plataformas como BlaBlaCarAmovens o RoadSharing, revolucionando así el transporte barato y ecológico entre ciudades.

No nos digas que no te apetece un road-trip a lo Thelma y Louise…

David Fernández (A Coruña, 24), es estudiante y confiesa haber hecho ya «unos 11 ó 12 viajes», todos ellos Coruña-Madrid y vuelta. ¿El motivo? Su novia, Clara, vive en la capital y cualquier otro medio de transporte le saldría por un ojo de la cara. Además, y lo mejor de todo, esta modalidad tiene una gran flexibilidad de horarios. Él, como tiene coche, siempre ha sido conductor, y ha coincidido con gente de todo tipo y condición: desde chicos en la misma situación que él, hasta señoras que le acaban regalando calabacines de su huerta («¡del tamaño de un bebé!»), presentándole a su marido y ofreciéndole ¡¡¡clases de yoga!!! ¿Alguna mala experiencia? «Cuando cuentas con gente desde hace días y te cancelan en el último minuto», comenta.

A partir de ahora, este es tu papel al volante:

Por su parte, María Navarro (Madrid, 25), solo ha probado la plataforma como viajera y no duda en recomendarla: «Es perfecto para moverse de un lugar a otro y, además, todo el mundo sale ganando: el que pone el coche y el que viaja porque es más barato y cómodo que otros medios de transporte», nos cuenta de su experiencia entre Madrid y Alicante. Raquel Céspedes (Alicante, 28), también viajera, se atrevió con el coche compartido para viajar a Barcelona a ver en directo a Beyoncé: «A la conductora le encantaban los monólogos y los enchufaba a todo volumen en el coche. A mí me hizo gracia, porque me gustaban, pero creo que a la alemana que iba con nosotros no le sentó demasiado bien…», dice.

¡Nada mejor que conocer experiencias para lanzarse a la aventura! Sin embargo, y por muchas ventajas que tenga, para muchos es muy difícil atreverse por timidez o desconfianza: «Es fiable, barato y cómodo», confiesa Raquel, así que lo único por lo que nos queda temer es por que no haya tema de conversación durante las X horas de viaje. ¿De qué narices voy a hablar yo, que no conozco a nadie aquí dentro? Si de dicharachera tienes más bien poco, no sufras: todavía puedes salvar la situación.

Aquí tienes 10 conversaciones a las que recurrir cuando el hacerte la loca mirando por la ventana deje de servirte… De nada:

Ya nunca más serás esta…

1. Sobre por qué vas a ese destino
Eso siempre es importante y, teniendo en cuenta que en el coche sois cinco y que (si estás leyendo esto) habrás elegido la opción de mogollón de bla’s (porque si no no tiene ningún sentido que estés aquí), seguro que, entre todos, cubrís, por lo menos, una hora de viaje con vuestras experiencias. Además, todos esos temas se pueden extender, porque el ir a ver a tu abuela a Villaconejos de Arriba puede acabar desembocando en el plato que mejor cocina ella, su nombre, su edad (“¡y está como una rosa!”) e incluso batallitas anécdotas de su vida. Por no hablar de los tuppers que estás deseando llevarte de allí… A través de este tipo de conversaciones, conocerás a gente muy distinta a ti, a todo lo que conoces o, incluso, a tu media naranja. ¡Que nunca se sabe, oye!

2. Sobre, ehm… hombres
Porque, si eres algo tiquismiquis para estas cosas, puedes elegir un coche en el que vayan única y exclusivamente chicas. Será el gran momento de hablar de cosméticos, de despotricar contra Alessandra Ambrosio con gente que te entiende de corazón (“porque, a ver, tiene cuerpazo pero guapa, guapa no es, ¿a que no?”) o del género masculino y su innata capacidad para cagarla constantemente. En efecto: ¿qué mejor que desahogarte sobre tu ex con gente a la que ni le va ni le viene? Si va a resultar que BlaBlaCar es terapéutico, te lo digo yo.

Y poneos de acuerdo para montar un club. Pero pacífico.

3. Sobre cocina
Oye, todos sabemos que cocinar bien no es en absoluto fácil y los mejores secretos de los chefs salen a relucir cuando un viaje pasa de nivel aburrido, a nivel aburridísimo-cuasi-insoportable. Vaya, que si alguna vez coincides en trayecto con el inventor de Coca-Cola, ya nos contarás…

4. Sobre el tiempo
Siempre recurrente, no nos vamos a engañar a estas alturas de la película. Es perfecto para iniciar cualquier conversación: “Pues dicen que va a refrescar este finde” – “¡No por dios! ¡Ahora que voy a la playa! ¡No me digas eso!” – “Que sí, que lo dice el tiempo del iPhone, y él nunca falla” (desviar la conversación al móvil, otro clásico). Pues eso.

Ojalá uno de estos en el Bla Bla.

5. Sobre redes sociales
Porque, si algo puedes hacer durante un viaje, es fotografiar e instagramear la siempre recurrente meseta ibérica y su siempre soleado cielo azul en verano. De ahí, pueden salir cientos de temas de conversación: que si ellos tienen perfil, que si son muy fans, que si yo tengo esta App que se llama VSCO Cam y que lo peta mogollón, ¡que si yo tengo gatos…! Además, seguro que ganas algún que otro seguidor, y eso tampoco está mal del todo.

6. Sobre animales
Bien enlazado ahí el tema: de las redes sociales, a Instagram, a los gatos… y de repente, ¡zas! Estarás enseñando a diestro y siniestro las instantáneas más cuquis de tu bola peluda con ojos. Y mira qué ojos tiene, y mira qué collar le he comprado, y mira qué ruiditos hace cuando se me tumba encima, etc. Admítelo: estabas deseando sacar este tema.

Nota mental: a este epígrafe sobre mascotas también es aplicable la opción «bebés». Enseña fotos de «tus gordis» hasta que al que se sienta en el medio le sangren los ojos de tanto bebé regordete.

O llévatelos de viaje también.

7. Sobre fútbol
Si no has elegido las múltiples posibilidades del punto 2 (aka ir solo con mujeres donde poder hacer el mal verbal de ventanillas para dentro), puede que el conductor de tu viaje sea chico, o incluso hombre, y todo. Y puede que a ese chico le guste el fútbol (y ojo, ¡que puede que sea una mujer a la que le gusta el fútbol!). Y puede que, así, tú le agrades a él como viajera y él tampoco sea excesivamente borde. Y entonces todos contentos, ¿no te parece? Llegados a este punto, tienes el cielo ganado.

8. Sobre actualidad (y celebrities)
Eso sí, solo si ves que al señor conductor y a tus queridos acompañantes de viaje les interesa lo más mínimo. Entra en nuestra sección de celebrities para enterarte de todo y, si no, menciona a nuestra queridísima Kim Kardashian… te aseguramos que te dará mucho que hablar. Fácil, ¿no?

En serio, nunca falla.

9. Sobre música
Gracias a las especificaciones de cada perfil en BlaBlaCar, podrás saber si a tus acompañantes les gusta o no la música. Si has elegido un coche en el que se escuche, he aquí un tremendo mundo abierto de posibilidades. Concretamente, de Bisbal hasta Lori Meyers, que para gustos, oye, los colores. O eso, o has ido a dar con un conductor que no tiene la menor gana de hablar (aunque haya dicho que sí en un principio) y prefiere cortar la tensión poniendo Radio Olé a todo trapo y al tercer hit de los Siempre Así empieces a delirar irremediablemente.

10. Sobre familia
«¿Y tú quién eres? ¿Y tienes pareja? ¿Y tienes hijos? No, no tienes edad para tener hijos…». Empieza con las preguntas porque, recuerda: después te preguntarán a ti y será el gran momento de contar anécdotas que encandilen a tu interesado oyente. Llegados a este punto de plena confianza, dale rienda suelta a tu imaginación y… ¡buen viaje!

En ‘Somos los Miller’ saben un poquito de esto.

Este artículo se publicó originalmente el 22 de julio de 2015.