Irse a la playa no tiene por qué ser la excusa para dejar de cuidarse y estar en forma. Al contrario, hay que verlo como una oportunidad para seguir haciendo ejercicio con nuevas rutinas, ejercicios y diversión. Y no hace falta que metas en la maleta todo tipo de aparatos y objetos que usas normalmente, como las mancuernas o las alfombrillas. Basta, muchas veces, con los bártulos que ya tenemos que llevar con nosotros para pasar el día frente al mar; y casi siempre, no hace falta nada más que las ganas de hacerlo. ¡Por no necesitar no vas a necesitar ni zapatillas!

Y, además, diviértete. © Pink

Para demostrarlo, hemos creado una tabla de apenas 10 ejercicios: muy sencillos pero suficientes para tonificarte y mantenerte activa y en forma durante las vacaciones. No hay que complicarse, y sobre todo hay que disfrutar de ellos. Divertidos y fáciles, seguro que acaba apuntándose el resto de la familia o amigos a seguir tus pasos. Y tras acabar, el resto del día por delante para seguir pasándolo bien.

Hemos dicho ejercicios 'sencillos' no 'tumbarte y no hacer nada'.
Hemos dicho ejercicios ‘sencillos’… pero no tanto.

1. Elevación de piernas. Con una pelota de playa nos tumbamos boca arriba sobre la toalla y sujetamos con los tobillos la pelota. Se trata de elevar las piernas, que deberán estar rectas, y realizarlo durante cuatro series de 15 repeticiones. Con ellos vamos a trabajar el abdomen inferior y fortalecerlo.

2. Tijeras. Un ejercicio que se utiliza mucho en clase de Pilates. Nos tumbamos en la toalla con las rodillas y los pies ligeramente flexionados en alto, uno algo adelantado. Con las manos en la nuca, el movimiento consiste en tocarnos con el codo la rodilla del pie contrario, moviendo estos en forma de tijera en cada repetición para que sea más fácil. Dos series de 20 repeticiones cada una.

Las palas: el clásico del verano para hacer deporte casi sin darte cuenta. © Cordon Press
Las palas: el clásico del verano para hacer deporte casi sin darte cuenta. © Cordon Press

3. Mancuernas. Convierte dos botes de bronceador (¡preferiblemente llenos!) de unos 250 ml., en mancuernas de gimnasio. Con ellos vamos a trabajar los hombros. Cogemos un bote con cada mano y los levantamos subiendo los bíceps hasta las orejas, con los codos en una posición inicial a 90 grados y tratando de elevarlos. Cuatro series de 20 repeticiones.

4. Contra la marea. Se trata de andar con el agua a la altura de la cintura. Pero no andar sin más, sino exagerando cada zancada y levantando la pierna el máximo que podamos. Eso nos ayuda a tonificar abdomen y piernas. Toca meterse en el mar.

Caminar por la orilla con el agua casi por las rodillas, otra opción para moverte este verano. © Cordon Press
Otra opción es caminar por la orilla con el agua casi por las rodillas. © Cordon Press

5. Remadas. Una vez hayamos dado unos paseos, llega el momento de subir un poco el nivel. Vamos a realizar ‘remadas’ hacia delante y hacia atrás colocando las manos rectas y las palmas de las manos planas, como si fueran palas de remo. En este caso, el agua nos debe llegar por el pecho, así trabajaremos brazos y tren superior.

6. Sentadillas. Sí, es uno de esos ejercicios que no apasionan, pero el objetivo de unos glúteos perfectos merece la pena. Haz tres rayas en el suelo paralelas, con una separación entre ellas que se corresponda con una buena apertura de tus piernas. Usa las líneas como guías y ve haciendo sentadillas una vez en cada hueco, desplazándote horizontalmente.

7. Subir a la colchoneta. Es sencillo, pero trabajarás muchísimo los músculos. Trata de subirte a la colchoneta apoyando las manos en el colchón y haciendo un ejercicio abdominal de impulso. Sin darte cuenta estás tonificando estómago.

Y si lo combinas haciendo el pino sobre la tabla, quemarás mucho más. © Cordon Press
Y si lo combinas haciendo el pino sobre la tabla… las calorías que quemas se multiplican… ¡mucho! © Cordon Press

8. Tabla. Es uno de los ejercicios más sencillos y en la arena te resultará más fácil todavía porque los dedos de los pies no sufren tanto. Te colocas bocabajo, apoyándote solo en las manos delante de tu frente y en los dedos de los pies. Trata de aguantar el máximo posible usando tu vientre como equilibrante.

9. Lluvia de arena. Nos sentamos en la arena y, usando los pies como palas, los introducimos en ella y levantamos toda la arena posible. Si conseguimos hacer un gran hoyo, al acabar, lo rellenamos con grandes brazadas.

También puedes practicar running, que en la arena fortalece más las piernas. © Cordon Press
También puedes practicar running a la caída del sol. Hacerlo por la arena fortalece más las piernas. © Cordon Press

10. Montaña de arena. De pie, tratamos de amontonar arena con los pies. Así vamos a trabajar la cara interna de los muslos, especialmente si apretamos bien los glúteos durante el ejercicio. Luego nos sentamos y, con las piernas abiertas y estiradas, amontonamos arena, tratando de arrastrar los pies para tener mayor resistencia. El resultado, una gran montaña con la que comenzar un castillo.

Y no te olvides de calentar, de los estiramientos al final… ¡ni de ponerte crema solar!

Este artículo se publicó originalmente el 29 de julio de 2016.