¿Sueñas con dar un giro a tu vida? ¿Estás saturada de pasar tantas horas en la silla de la oficina? Quizás hayas orientado mal tu carrera profesional. Más allá de abogados o economistas, existe un mundo de profesiones insólitas que quizá no conocías. Hablamos de formas de ganarse la vida con las que no nos importaría nada oír el despertador cada mañana e incuso hacer horas extras si fuese necesario. Y es que muchas de ellas han convertido un hobby en una profesión. Después de leer este artículo, solo pensarás en actualizar tu currículum.

¿Hacemos de un hobby profesión? © Mondadori Photo
  • Probador de toboganes de agua

¿No te lo crees? Tampoco debió hacerlo Sebastian Smith cuando le contrataron para recorrer el mundo en bañador, comprobando la velocidad, impulso, cantidad de agua, y otros factores de los que depende la diversión en un tobogán de agua. Todo a cambio de 20.000 libras al año y poder disfrutar del trabajo menos monótono del mundo.

  • Guardián de isla paradisíaca

Fue bonito mientras duró. Ben Southall se presentó a unas pruebas, junto con otros 34.000 candidatos de 200 países, para promocionar el turismo de una isla australiana. Y aunque muchos lo habríamos hecho gratis, el británico ganó 115.00o dólares australianos y alojamiento en una villa de lujo durante su estancia de seis meses en el paraíso. ¡Nada mal!

  • Abrazador de osos panda

Si no te importa mudarte a China, puede que el Centro de Investigación y Protección del Panda Gigante esté en este momento buscando personal que mime a estos tiernos animales cuando son pequeños. El sueldo es de unos 32.000 dólares al año, más dietas y alojamiento, aunque no es tan fácil como parece: a veces, si el osito te persigue y se pone pesado, puede resultar un poco estrenaste.

https://www.youtube.com/watch?v=-V1cpzxBNII&feature=youtu.be

  • Catador de helados

Aunque ya está jubilado, John Harrison fue uno de los mejores catadores de helados del mundo, o nos atreveríamos a decir que el mejor, ya que, durante su carrera, tuvo su boca asegurada en un millón de dólares. Vamos, ni Casillas cuando cantaba: “Me siento seguroooo”.

«Yo quierooooo».
  • Catador de noodles

Si eres más de salado, y te gusta la comida oriental, preferirás dedicar tu jornada laboral a comer noodles, como Crispin Busk, fundador de Kabuto, capaz de probar 600 tipos de noodles en un mes sin empacharse.

«¡Es legendario!».
  • Profesor de surf… ¡de perros!

Que en California haya competiciones de surf no es nada extraño, pero que los que compitan sean perros, choca un poco. Todos los años, en la playa de Huntington (Los Ángeles), los canes se mueven sobre las olas como el mismísimo Kelly Slater. Y claro, alguien tendrá que darles unas clases para ser campeón.

  • Artesano de globos terráqueos

En la empresa Bellerby & Co primero se comienza como aprendiz (se puede tardar entre seis meses y un año en conseguir elaborar un globo terráqueo pequeño), para desarrollar una profesión que puede parecer de película. Pero es real. Eso sí, se necesita mucha paciencia y un buen pulso.

  • Tageador de Netflix

¿Te imaginas que te pagasen por todas las series que ves a diario? Sí, podrías ser de oro. Lo cierto es que existe un empleo que consiste en ver la oferta de Netflix sin parar con el fin de añadir tags a cada uno de sus contenidos.

  • Escritor de galletitas de la fortuna

Si siempre soñaste con ser escritor, empieza a practicar por pequeños mensajes, concretamente los que aparecen en las galletas de los restaurantes chinos. La empresa Wonton Food distribuye unos 4 millones al día de este clásico producto de la gastronomía china a todo el mundo, así que trabajo no les falta.