Finalmente llegó el día del estreno mundial de la esperadísima Cincuenta Sombras de Grey. El Festival de Cine de Berlín extiende la alfombra roja del legendario Zoo Palast para que Dakota Johnson, Jamie Dornan y la directora Sam Taylor-Johnson muestren el resultado de 18 meses de arduo trabajo. Una cinta que llega entre grandes expectativas por parte de los millones de lectores de la trilogía de E.L James, pero también entre aquellos que llegarán completamente vírgenes a los 125 minutos de la historia entre Christian Grey y Anastasia “Ana” Steele.

Mucho antes de la proyección especial para la prensa en el IMAX del moderno Sony Center – pautada a las cinco de la tarde-, había aterrizado en Tegel Jamie Dornan (con gorrito y barba de hipster), acompañado de su esposa, quien salió por la puerta de “Llegadas” como un pasajero más, a diferencia de Jamie que rodeado de guardaespaldas, optó por otra salida, dejando con las ganas de autógrafos y selfies al nutrido grupo de seguidores que se había desplazado hasta el aeropuerto muy mal, Jamie…

© Cordon Press
Jamie y Dornan la noche del miércoles en el estreno de la cinta en el Festival de Berlín. © Cordon Press

Dakota Johnson llegaría un poco más tarde (con sombrero y gafas oscuras), y antes de partir hacia el muy de moda hotel SoHo House (ubicado en la Torstraße de Berlín-Mitte), sí que se detuvo a estampar su firma para alegría de los fans.

Después del estreno, el equipo de Cincuenta Sombras de Grey celebrará a lo grande (en un conocido local berlinés) independientemente de lo que diga la crítica. Por lo pronto, el rumor de una secuela (sin Sam Taylor- Johnson) cada vez es más fuerte.

© Cordon Press
Ella con labios rojos y él con barbita hipster. © Cordon Press

Los claroscuros de las sombras

Que si Dakota y Jamie no eran los “ideales”, que si la escena del tampón se quedaría (de hecho se quedó) fuera, que Sam Taylor-Johnson estuvo muy presionada durante todo el rodaje, que si la película defraudaría a los millones de lectores en todo el mundo, etc. Tanto se había comentado que todos los periodistas en el festival estaban ansiosos por ver el resultado de la adaptación de Cincuenta Sombras de Grey.

© Cordon Press
Sam Taylor Johnson (de Stella McCartney) llegó con su marido, Aaron Taylor-Johnson. Jamie Dornan con su mujer, Amelia Warner. Y Dakota, llegó sola, con un vestidazo de Dior. © Cordon Press

En líneas generales, no se puede obviar el buen rendimiento de Taylor-Johnson, que sabe cómo contar una historia, recurriendo a los recursos necesarios para subrayar momentos determinados (como la música y movimientos de cámara); y aunque no muestra ningún primer plano de genitales (ni femeninos, ni masculinos), resuelve con elegancia (tal vez rozando en el pudor-miedoso) las escenas de sexo.

Entre Dakota y Jamie sí se enciende la chispa. Sin duda, el señor Grey está bien dotado, pero no hay que distraerse con tanto cuerpo perfecto y miradas magnéticas. Ambos se desenvuelven bien en sus respectivos roles, pero tal vez sea (¡oh, sorpresa!) Dakota la que se lleva un sobresaliente por su interpretación. ¿Quién iba a imaginar que la hija de Melanie pudiera construir una Anastacia que se deshace poco a poco de su ingenuidad para terminar dando un portazo?

No nos vamos a engañar, Cincuenta Sombras de Grey no es una obra maestra de la cinematografía (ni de la literatura). A veces los diálogos provoca alguna que otra risa de burla (“No soy hombre para ti, deberías alejarte de mí…”, advierte Grey, o “No quiero romanticismo, mi gusto es muy particular…”), como también está fuera de lugar que se tilde al sadomasoquismo como un mero trastorno sexual. Pero esa ya es otra historia…

© Cordon Press
Dakota, con su Dior, y Jamie. © Cordon Press

Y tras una intensa noche en Berlín, llegó Londres:

[galeria]