¿Alguna vez has oído hablar del Modelflor de la Señorita Pepis? Fue el juguete de moda en los años 70 para todas esas niñas que ya apuntaban maneras y querían fabricar (antes de saber coser o tejer) sus propios vestidos. Como si de un puzzle se tratase, dentro de su caja venían unas cuantas bolsitas llenas de piezas de plástico de colores que podían unirse a través de ganchos y arandelas formando camisetas o faldas, e incluso chalecos y ponchos.

Tal y como aquellos era el vestido que anoche lució Amaia de España en la gala número 11 de Operación Triunfo. Fue el perfecto compañero para su actuación más sexy y de nuevo un acicate para mostrar la naturalidad de la triunfita, que confesó: «Me ha dicho Rosa la de vestuario que no diga que me pincha el vestido»… El caso es que España se vuelve loca por Amaia y, cómo no, una vez más se vuelve loca por su vestido formado por espejos. Sabemos quién fue su creador: Gustavo Adolfo Tarí, especialista en vestuario de espectáculo, cine, teatro y televisión que creó el vestido especialmente para Rosa Planas, la estilista de OT, y para Amaia… Pero quizá ni ella misma conozca la historia del chain-mail dress.

Pues bien, resulta que la culpa de semejante éxito fue de Paco Rabanne. En esas décadas, el diseñador demostraba que se podía hacer mucho con muy poco: creó originales y exquisitas prendas de ropa sin utilizar los tejidos hasta entonces conocidos. Así, convirtió sus diseños en iconos y fue apodado por su colega Coco Chanel como ‘El Metalúrgico’; llevó su oficio un paso más allá y moldeó discos de vinilo, distintos metales y eslabones de malla, creando prendas a medio camino entre la moda y la escultura.

Creaciones como estas le valieron a Paco Rabanne el sobrenombre de ‘El Metalúrgico’. © Getty Images

Hoy, más de 40 años después, el Modelflor de la Señorita Pepis vuelve a estar en las estanterías de miles de jugueterías. Y, esta vez, la culpa es de Balmain. Olivier Rousteig ya adelantaba sus intenciones cuando vistió a toda su Balmain Army para la gala del MET del año pasado, con vestidos metálicos y enrejados. Aunque no fue hasta septiembre cuando pudimos ver sus nuevas propuestas: una suerte modernizada y coloreada de cota de malla (esas protecciones de hierro que vestían los guerreros de la Edad Media) cubrió a sus modelos para el desfile que presentaba los hits de la temporada.

Gigi Hadid desfilando para Balmain con un chain-mail dress. © Getty Images

Pero si hay una verdad suprema, una norma básica, una máxima que rige el comportamiento de la moda y es imprescindible para que cualquier prenda se cuele en los armarios de medio mundo… es que la lleven actrices, cantantes, modelos e influencers. En efecto, las pasarelas crean tendencia y las celebrities prescriben, a veces, incluso desde el mismo momento del desfile. Ejemplo práctico: Kourtney y Kim Kardashian -parte esencial de la crew de Rousteig- se sentaron en su front row ataviadas con sendos vestidos naked, una en negro y otra en dorado y, tras el desfile, se cambiaron de ropa para dar paso a lo nuevo de su firma fetiche, un chain-mail dress en oro, plata y bronce que marcaría un antes y un después.

Las Kardashian (en su totalidad) adoran este vestido. ¿Necesitas más garantías de éxito? © Getty Images

Todo el glamour que necesitaban para una gran fiesta nocturna, conseguido en un solo gesto. Tal es el poder de un vestido de estas características que, tan solo un mes después, la mismísima Michelle Obama lució un precioso chain-mail de Atelier Versace en color oro rosa para la que fue su última cena de gala como primera dama en la Casa Blanca.

Su éxito fue tan sonado como el que días después consiguió Kendall Jenner en la celebración de su 21 cumpleaños: llevaba un chain-mail dress plateado en versión mini y compuesto por cientos de pequeños cristales de Swarovski (sí, una copia exacta del que Paris Hilton escogió para su también 21 cumpleaños hace ya 14 primaveras).

Algo está pasando si Kendall Jenner y Michelle Obama coinciden en una tendencia. © Getty Images

Que la celebrity más mediática de todo el panorama internacional aka Kim lleve un chain-mail es garantía de éxito. Que lo lleve su hermana, una de las modelos e it girls más seguidas del momento aka Kendall, es garantía de éxito. Que una primera dama aka Michelle, que da ejemplo en cada uno de los aspectos de su vida pública, elija un chain-mail es garantía de éxito… Pero que las tres coincidan y defiendan con tanto gusto –y tan diferentes personalidades- esta nueva tendencia es, sin duda, una directriz clara y una clave de estilo que ha conquistado a toda una nación.

Y la prueba son ellas mismas y sus colegas. Actrices, modelos y demás celebs que ya tienen su chain-mail dress y que se han encargado de lucirlo como una tendencia así se merece. Aquí las 10 razones por las que también querrás llevarlo tú:

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