Moda
ACTUALIZADO: 4 DE MARZO DE 2016
En el último show de Balmain en París, Oliver Rousteing supo (como acostumbra) ser el centro de atención cambiando el color de pelo a algunas de sus modelos. Kendall, de repente, era rubia platino; Gigi, por su parte, más morena que la propia Pocahontas. Se hicieron con los flashes, claro, pero, aunque el cambio sea puntual (todo es obra de las pelucas de Sam McKnight), ¿son estos nuevos colores los que más les favorecen según la ecuación del experto Josh Wood?
EL 8 DE ENERO LEÍSTE…
«Llevar el tono de color que nos favorece hace más por nuestra imagen que el mejor de los maquillajes», explicaba a Grazia.es Josh Wood hace unas semanas mientras tomábamos el té en un salón privado de la Tate Britain de Londres. Y es cierto. «Un tono de pelo equivocado puede resultar desastroso y, en cambio, uno acertado puede resaltar las facciones, hacerte realmente atractiva, disimular pequeños defectos», añadía mientras presumía de una de sus modelos, teñida de un tono espectacular mezclado con sus canas naturales.
Ahora bien, ¿cómo saber qué color es el perfecto? A veces solo supone un pequeño cambio con respecto al tuyo natural, otras es una sutileza a base de reflejos, casi siempre consiste en unos grados más cálido o más frío del que llevas y voilá! Pareces otra.
Josh, el jefe
Josh Wood es el colorista de mejor reputación del mundo. También es el más influyente. Lo que él dice, se hace. Wella lo tiene entre sus garras y no lo suelta. De hecho, es su director creativo global y quien propone y ayuda a desarrollar algunas de las coloraciones más punteras de los últimos tiempos.
¿Los tintes de tonos realmente naturales? ¿La sublimación de los rubios? ¿La aparición en escena de los grises? Todo es obra suya. Por sus pinceles han pasado cabelleras fabulosas como la de Elle Macpherson, de quien confiesa ha conseguido el rubio sweet spot. Algo así como el punto exacto, el tono mágico que le hace parecer más atractiva, si cabe. Atiende personalmente a una no-confesada legión de VIPS, lo que deja poco espacio a nuevas clientas. Solo cuatro al mes. Solo si es jueves. Solo si está en la lista de espera. Al módico precio de 550€ la sesión, para empezar. En la privacidad de su atelier cerca de Holland Park, en Londres. Vaya, que es un gurú, ¿esperabas menos?
Pero volvamos al sweet spot. ¿Cómo puede lograrse el tono perfecto de pelo, ese que te favorece por encima de cualquier otro que esté de moda o que se te haya antojado leyendo una revista? Fijándote en tu piel y tus ojos. Wood lo llama ‘Ecuación de Color Perfecto’ y está enseñándoselo a todos los peluqueros de la red de Wella, más de 40.000 profesionales, muchos de ellos en España.
Tono de ojos + Tono de piel = Tono de Cabello
«He desarrollado con Wella una fórmula que nunca falla. Ojos + Piel = Cabello», argumenta Wood. Con ella, cualquier peluquero puede identificar el tono exacto que te favorece.
En la práctica, es así: si tienes un tono de piel cálido y unos ojos también cálidos, entonces el cabello deberá tener una tonalidad fría. Si eres de tez fría y ojos fríos, te favorecen los tonos cálidos. El orden de los parámetros no importa, lo que no puede ser es que los tres sean cálidos o los tres fríos.
Piel cálida + ojos cálidos = cabello en tonalidad fría
Cuando decimos cálido y frío se entiende que puede haber un castaño frío y un castaño cálido y un rubio cálido y otro frío. Y, muy importante, esa elección debemos dejarla en manos del peluquero, que es quien se ha formado y sabe exactamente la diferencia. De esta forma lo explica el experto: «La habilidad del profesional está en su capacidad para evaluar y considerar nuestras características, y la ecuación es una herramienta para que los peluqueros no se equivoquen».
¿Quieres saber cuál es tu sweet spot? En los salones de Wella podrás averiguarlo.
