Llevamos meses hablando de Ana de Armas por su participación en la película Blade Runner 2049, junto a Ryan Gosling, en la que borda un pedazo de papel, por cierto. Sin embargo, como pasa tantas otras veces con multitud de actrices, pudiese parecer una burbuja de éxito pasajera que desaparecerá en cualquier momento. No es su caso. La actriz ha pisado con fuerza la alfombra roja de la 18ª edición de los premios Grammy Latinos dejando claro que no piensa irse a ninguna parte.

Y esa mirada de «aquí estoy yo» lo dice todo. © Getty Images.

¿Acaso nos han llamado a nosotras para entregar un premio en dicha gala? Que igual estábamos hablando por la otra línea y no nos enteramos. Desgraciadamente no. Ana subió al escenario del MGM Grand Garden Arena de Las Vegas con paso firme y del brazo del también actor Edgar Ramírez (con el que dicen que está saliendo tras coincidir en el rodaje de Hands of Stone). Independientemente de cotilleos amorosos la verdad es que hacen una estupenda pareja, atentas a la manera en la que la actriz hizo su entrada triunfal.

De verdad que eso es actitud y lo demás son tonterías. © Getty Images.

¡Pero si camina mejor que un ángel de Victoria’s Secret! Así no es de extrañar que fuese una de las mujeres más solicitadas de la noche y que muchos de los asistentes a la gala, como el músico Rubén Blades, le pidiesen un selfie.

«Esta para mi Stories», parece decir el cantante. © Getty Images.
  • Una agenda imparable

La actriz llegaba a Las Vegas después de pasar por el Napa Valley Film Festival, uno de esos pequeños grandes festivales en los que se cuece la trastienda de Hollywood. Viejas glorias y nuevos talentos se reúnen en torno a unas excelentes copas de vino producto de la tierra para decidir quiénes brillarán en los próximos años, meses. Así pues, Ana está en el place to be que dirían en inglés.

Además, y ya que hablamos de brillar, qué decir de la elección de su estilismo para los Grammy Latinos. No, en serio. Necesitamos por soñar que no quede este espectacular vestido de Ralph & Russo AW 2017/2018 Couture Collection.

Hola a ti también amiga. Estás radiante. © Getty Images.

Una creación realizada en tul negro y gris con hilos de plata, lentejuelas y cristales como adornos. Pero si ya te ha enamorado por delante, espera a ver la espalda.

Un look propio de toda una estrella de Hollywood. Normal. Ana de Armas no solo triunfa en el séptimo arte. En el octavo, que es la moda o eso digo yo, la actriz cuenta con la ayuda de la estilista Michaela Erlanger. ¿Quién? Pues amigas, la misma que hace brillar en las alfombras rojas a Lupita Nyong’o o Diane Kruger. Una relación profesional y personal que la propia estilista documenta en Instagram.

Resumiendo. Ana ha llegado a Hollywood para quedarse. Y nosotras que nos alegramos.