Moda
Muy al estilo de Justin Bieber y Hailey Baldwin, David Bustamante y su compañera (al menos, de baile), Yana Olina, fueron captados, cogidos de la mano, por las calles de Madrid, ella, con jeans y tacones y él, un poco más desaliñado, con sudadera y gorra…
En medio de la polémica sobre quién se quedó con la custodia de Poty Castillo, si David Bustamante o Paula Echevarría, el cántabro prefiere hacer caso omiso a las especulaciones y seguir con su vida. «Nos queremos mucho y los tres seguimos siendo muy amigos», zanjaba el coreógrafo durante el Festival de Vitoria.
Del lado de Yana Olina, desde que la conocimos en Bailando con las estrellas hasta que finalmente se coronó, junto a David Bustamante, como ganadora del concurso, la hemos visto siempre apoyando al cantante en todas sus aventuras. Desde la sorpresa que le dió llegando al camerino, en pleno concierto en Xátiva (Valencia), donde Yana acudió con dos de los bailarines del programa, David Morante e Inés Ferrero, hasta las palabras de aliento y admiración que le profesó durante todo el programa. Aún no hemos superado aquel bonito “Quiero agradecer al equipo, sobre todo a mi compañero. He podido llegar hasta aquí, junto a él y he disfrutado mucho esta experiencia», que le dedicó tras proclamarse vencedores.
Y, aunque ninguno de los dos ha confirmado ni desmentido oficialmente la relación, después de la visita de la bailarina a la tierra de David Bustamante y las declaraciones de Yana Olina en su cuenta de Instagram, donde afirma que «El amor es tener a una persona con la que puedes tontear, volverte loco como los niños, con quien puedes ser tú mismo, en quien puedes confiar», parece que la pareja no puede negar lo evidente.
Además, si a eso le sumamos lo compenetrados que salieron del estudio de grabación para después trasladarse a la casa de David Bustamante en Pozuelo de Alarcón, parece que lo suyo va más allá de un tango en prime time.
Fotos: Getty Images