Probablemente sea la dama de honor más famosa de la historia reciente, pero la semana que viene se va a convertir, además, en novia. Y sí, su boda está dando tantísimo que hablar que nos cuesta elegir un solo detalle con el que recrearnos.

Así que aquí llega equipo-Grazia-al-rescate para recopilar los 10 datos que probablemente aún no conozcas y que dan todas las claves del que promete ser la boda del año (contamos con que Chiara se espere a 2018).  Muy atenta, porque esta boda no tiene desperdicio.

Quién fuera Pippa aquel día… ¡ay! © Getty Images

1. El vestido
Empezamos por este detalle porque (como no podía ser de otra manera) aún es una incógnita. Pero por supuesto, la prensa británica lleva días barajando opciones e intentando encontrar algún resquicio en el que apoyarse para descubrir el secreto mejor guardado de la boda del año. Lo que podemos saber de momento es que no será un vestido sobrio como el que llevó a la boda de su hermana Kate, y que uno de los nombres que más fuerte suena para su diseño es el de Sarah Burton (Alexander McQueen), quien se encargó de vestirla con increíble éxito para la boda de los Duques de Cambridge.

2. El anillo
Sin embargo, el anillo de pedida con el que su prometido le pidió matrimonio, ya ha sido de sobra reconocido y estudiado. Efectivamente, los rumores son ciertos: cuesta más de 200.000 euros. Y es que se trata de una joya de estilo Art Decó diseñada por un reputado joyero británico (el mismo que creó los pendientes que Kate lució el día de su boda): tiene forma octogonal y está realizado en oro blanco, un diamante central y cuatro quilates rodeados de pequeños diamantes.

«Cómo se nota dónde hay…»

3. La organización
Pippa no necesita wedding planner, ella misma se ha encargado de que la organización sea perfecta. Que sirva para algo su carrera orientada a la preparación de eventos que le hizo vender algunos libros (y ganar algunos detractores). Eso sí, para que todo vaya como la seda el ‘día B’, Pippa ha contratado a Jo Milloy, la relaciones pública de la realeza (del star system); la misma que se encarga de proteger las imágenes de, por ejemplo, David y Victoria Beckham.

4. La localización
Tras la ceremonia religiosa, que tendrá lugar en la Iglesia de San Marcos en Englefield, todos los invitados se trasladarán a Bucklebury, un pueblito cercano donde los padres de la novia tienen una preciosa casa en la que la privacidad está garantizada.

5. Los invitados
Según se ha revelado, tan solo asistirán a la boda 150 invitados. Muy bien Pippa, mejor calidad que cantidad. Y además, por expreso deseo de la novia, las puertas del recinto se cerrarán, aunque la tradición anglicana dicte que deben quedar abiertas durante el enlace. 
Eso sí, todo poder conlleva una gran responsabilidad y ser invitado al enlace llega con unos cuantos requisitos. Para empezar, nada de rolletes de una noche como consortes: «No ring, no bring», es la curiosa norma de la hermana de Kate para que a su boda solo acudan esposos y prometidos.
Además, se ha pedido a los asistentes que preparen dos modelitos (¡¡dos!!, como si no fuera suficiente quebradero de cabeza y agujero en el bolsillo uno): el primero, protocolario, para la ceremonia en la iglesia y el segundo, más relajado, para la recepción en la casa de la familia.

Guapita, ¿te has quedado bien tranquila con todas esas normas? © Getty Images

6. Los VIPs
A pesar del escaso número de invitados que se esperan, lo difícil es no ser VIP en esa boda. Pero, como siempre, algunos se llevarán la palma. Desde el futuro cuñado de Pippa (hermano y padrino del novio), Spencer Matthews, protagonista de varios realities de la televisión británica, hasta Meghan Markle. Todo apunta (sobre todo porque se sabe que ha solicitado un permiso a la productora de la serie Suits para ausentarse del rodaje del 15 al 22 de mayo) a que la actriz acudirá a la celebración del enlace como pareja oficial del Príncipe Harry. El cuñadísimo de Pippa es el único que puede saltarse la estrafalaria y anacrónica regla del anillo porque, hasta donde sabemos, no le ha pedido matrimonio a su novia.

Y hala, parejón oficial.

7. Los MUY VIPs
Pero hay más: aunque la Duquesa de Cambridge no será dama de honor como pasó en el caso contrario, sí se preve que se encargue de hacer una lectura en la ceremonia. Mientras que su hija, Charlotte, sí ejercerá de pequeña damita y su hijo George, de paje.

8. El novio
Se llama James Matthews, tiene 40 años (ocho más que ella), es director ejecutivo de Eden Rock Capital Management (un fondo de cobertura que él mismo fundó en 2001) y posee una de las mayores fortunas de Inglaterra.

9. El título
No es que la boda vaya a ser temática y tenga un nombre propio (o sí, ojalá), a lo que nos referimos es a uno nobiliario. Correcto: tras la boda, y en el caso de que sigan casados cuando fallezca el suegro de Pippa, James heredará un título escocés que su padre posee. Así que Pippa será, entonces, Lady Glen Affric (muy chic todo, oye).

10. Las fotos
A pesar de que para los ingleses esta es la boda del año (algunos afirman que de la década), el interés público no ha logrado que haya fotos oficiales. Pero sí se baraja que la pareja utilice algunas de sus imágenes privadas para donarlas con fines solidarios.

«Uuuuuy, qué generosos y poco derrochadores ellos»

+1. La fecha
20 DE MAYO DE 2017. Sí, es casi ya. Que no se te olvide.