Hablemos de lo que realmente significa el Día del Orgullo o Pride, como en los lugares de habla no hispana se conoce.

Pride no es para celebrarse un día al año, ni un mes. La inclusión no significa otra cosa más que respeto y la lucha no valdrá la pena hasta que logremos trascender sin etiquetas. Que las siguientes generaciones comprendan que un matrimonio es solo eso, y que categorizarlo es despectivo —¿por qué hay que llamarlo “matrimonio gay”?—; o «salir del armario» no sea un paso difícil de superar, sino un momento cotidiano como lo es empezar una relación de novios. Nadie debe ponerse límites por prejuicios sociales, porque el placer más grande de la vida es compartirla con quien realmente queremos sin explicaciones. Vestirnos de los colores del arco iris o lucir la bandera no es suficiente para celebrar a la comunidad. El cambio está en los valores y en la empatía.

Hoy comienza la Semana del Orgullo, y después de dos años de pandemia regresa a lo grande. Las celebraciones terminarán el fin de semana del 9 y 10 de julio, cuando tendrá lugar la gran marcha del Orgullo este 2022.

Pero aunque la lucha haya tomado más fuerza en los últimos tiempos, su historia comienza casi a principios del siglo pasado.

1924

«Amistad y libertad» era el lema del primer grupo defensor de los derechos gay en 1924 liderado por Henri Berger, quien después fundó la primer sociedad para derechos humanos en Chicago.

1958 – 1969

En 1958 la Suprema Corte de Justicia en Estados Unidos falló a favor de los derechos de los gays, sin duda un gran paso en la historia para la comunidad LGBT. Sin embargo, a finales de los cincuenta y principios de los sesenta, los miembros de la comunidad eran desterrados de los establecimientos públicos. Fue en 1969 que la policía estadounidense organizó una redada en The Stonewall Inn, un bar gay en la ciudad de Nueva York. El evento se convirtió en una protesta violenta, la que hoy conocemos como los Stonewall riots, y se le considera el inicio de la lucha contra los derechos de la comunidad LGBTQ.

1973 – 2000

1973 es quizá el más importantes en la historia, siendo en el que se borró a la comunidad de la lista de enfermedades mentales tras años de análisis e investigación. Luego del logro, en 1987, el estadounidense Barney Frank se declaró voluntariamente gay, siendo el primer político en la historia. En el 2000, el estado de Vermont toma el gran paso de legalizar el matrimonio del mismo sexo.

2009 – 2019

En 2009 fue que el presidente Obama firmó una nueva ley a favor de los derechos de la comunidad tras dos asesinatos a una persona por ser gay y a la otra por ser de color. El presidente declaró la discriminación de este tipo como un crimen.

Este año, se levantará en Nueva York un monumento conmemorativo a los disturbios de Stonewall y será dedicado a Marsha P.Johnson y Sylvia Rivera, activistas que jugaron roles muy importantes en la lucha a favor de los derechos de la comunidad LGBTQ.

Después de todos los sucesos en Estados Unidos, Pride se celebra en distintas partes del mundo y es importante mencionar que aunque en México se legalizó el matrimonio gay en 2010 y las marchas en el Ángel de la Independencia sean masivas, aún falta mucho por aprender para poder aplicar uno de los valores más importantes: el respeto.

*IMÁGENES: Getty Images y Unsplash