No hace falta que sea Semana Santa para planear una escapada a un spa, pero estos días libres son una excusa perfecta para organizar un día de relax relativamente improvisado. No tienes por qué ir en pareja. De hecho, es una ocasión ideal para juntarte con amigas o con tu madre y disfrutar un rato de intercambio de confidencias mientras los chorros de aguas termales hacen que tu músculos borren la tensión y los tratamientos recuperen tu piel del estrés y la contaminación de la ciudad.

Hemos seleccionado diez spas que nos encantan, seguro que encuentras el plan que estabas buscando:

[galeria]