En Salzburgo, rodeada de verdes colinas y a orillas del Lago Leopoldskroner Weiher, se ha presentado la colección pre-fall de Chanel: Paris-Salzburg, la que se conoce como Métiers d’Art por emplear las piezas de todos los talleres artesanos que la maison posee bajo la compañía subsidiaria Chanel Paraffection (Desrues, Lesage, Massaro, Barrie, Michel…)

El impresionante Castillo Leopoldskron, uno de los palacios de estilo rococó más importantes de Austria, ha abierto sus puertas para acoger las últimas creaciones de Karl Lagerfeld para la casa, esta vez (y como no podía ser de otra manera) de temática austriaca.

Interior del castillo de Leopoldskron.  © Cortesía de Chanel
Interior del castillo de Leopoldskron. © Cortesía de Chanel

Porque si en los últimos años Chanel ha viajado a Bombay, a Dallas o a Moscú y se ha impregnado del estilo de cada uno de sus destinos, no cabía duda de que en Salzburgo Lagerfeld sería capaz de hacer lo mismo: de pasar bajo su peculiar filtro de perlas y tweed a tiroleses y princesas austro-húngaras. 

Pero, con permiso del káiser, la protagonista indiscutible ha sido Cara Delevingne (compartiendo el cierre del desfile con Kendall Jenner) reina y señora del castillo tras protagonizar el vídeo con el que se ha presentado la colección.

Precisamente este, el vídeo, es el encargado de recordarnos cuál es el vínculo de Mademoiselle Coco con Austria. Ese fino hilo del que cada año, desde el 2002, Karl se encarga de tirar.

Orejeras de pelo trenzado, bordados, punto y otros detalles del desfile.  © Cordon Press
Orejeras de pelo trenzado, bordados, punto y otros detalles del desfile. © Cordon Press

En el destino de este 2014 ese nexo llega de la mano de la icónica chaqueta con la que Coco regresó al ojo del huracán en 1954 (y tras un retiro de 15 años), pieza que le inspiró el botones de un hotel en Salzburgo. Concretamente del Mittersill, un alojamiento de lujo propiedad de su amante el Barón Hubert von Pantz y en el que la creadora pasó largas temporadas.

Así que en la colección hemos visto chaquetas, muchas. Pero también algún abrigo, capas y cazadoras. Pantalones y minifaldas combinadas con leotardos, capas y capas de punto sobre puestas, bordados que remataban de vestidos a levitas y una incesante combinación de colores que se cerraba con los 15 últimos looks en negro (a excepción del vestido de novia de Cara).

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