«Veamos, por dónde empiezo… Mi nombre es Barbie Roberts, tengo tres hermanas y vivimos en Los Angeles. Bueno, en Malibu, pero realmente somos de Wisconsin. Mis padres son escritores y les encantaba la idea de criar a sus hijos junto al mar, pero siempre volvemos a Wisconsin en vacaciones. Así que siento que tengo lo mejor de ambos: ¡puedo hacer surf y snowboard!». Así es como Barbie se presenta en el primer vídeo de su nuevo vblog, por si acaso alguien en este mundo todavía no había caído en quién era esa chica rubia animada con ojos saltones que había al otro lado de la pantalla…

© YouTube
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Pues sí, como no puede parar quieta, ahora ha decidido que lo de ser millennial es lo suyo. En su Instagram reúne ya a 456 mil seguidores y ahora sigue su conquista de la Red con un canal en el que se acercará un poco más a sus fans, en el que contará lo que le gusta y lo que no, lo que hace y lo que no, cómo se maquilla y cómo no… en fin, ¡ya sabes! Todas esas cosas de vbloggers de aquí y de allá.

Tiene 56 años, sí, pero no es como cuando tu madre se hace Facebook o intenta saber qué es Snapchat; Barbie vive en una eterna juventud desde hace cinco décadas y ha sabido sacar lo mejor de cada una de ellas, así que ahora, en el s. XXI, toca lo que toca y una tiene que ganarse el pan… sobre todo después de haber cambiado de trabajo tantas veces como ella.

Profesora, astronauta, bombero, médico... lo que ella quiera.
Profesora, astronauta, bombero, médico… lo que ella quiera.

La muñeca más famosa del globo sabe que este es el negocio más rentable del momento y, ¿quién mejor que ella para hablar ante la cámara y que el mundo escuche? Porque igual no te lo habías planteado nunca, pero Barbie tiene todo lo que hace falta para ser una Youtuber de éxito…

1. Un novio que le hace fotos. Esencial cuando compagina su imagen en vídeo con sus looks en Instagram. Además su novio es resultón está bien bueno y todas pensamos que hacen la pareja más cuqui del lugar. Bombazo.

Barbie se hace vblogger

 

2. Un armario inmenso. Ni siquiera Chiara Ferragni puede competir con ella en esto: Barbie lo tiene todo. Y lo que no tiene, se lo hacen. A medida. Así que en este aspecto no hay rival alguno. Venga, ¡deléitanos con tus #ootd los 365 días del año!

3. Mentalidad Pinterest: porque «a mis amigas y a mí nos encanta compartir ideas, nueva música, películas favoritas, vídeos, tips de estilo…». O, mucho mejor: «lo que me hace feliz es escuchar a los pájaros cantar a través de la ventana y compartir mis cosas favoritas». Alma blogger con melena rubia.

Y toma zumos verdes, ¡para qué queremos más! © Instagram @barbie
Y toma zumos verdes, ¡para qué queremos más! © Instagram @barbie

4. Un millón de amigos: que ya le gustaría a Roberto Carlos tener tantos contactos en el móvil como esta chica. Además, su público es de todo tipo, de todas partes del mundo y de todas las edades. En serio, éxito asegurado.

© Instagram @barbie
© Instagram @barbie

5. Vive en Malibú: y todas sabemos que eso es una fuente de instantáneas de esas que nos matan de envidia pero no podemos evitar seguir viendo cual droga.

Estampas así y de pies sobre arena fina a la orilla de la playa... © Instagram @barbie
Estampas así y de pies sobre arena fina a la orilla de la playa… © Instagram @barbie

6. Hace surf, y las surferas son las más molonas, ergo ella también lo es.

7. Valora un zapato plano: después de décadas subida a un tacón, Barbie se ha dado cuenta de que sus looks son 30 veces mejor con deportivas o zapatitos sin alza alguna. ¿Hay algo más cool que eso? No. Punto.

8. Tiene sentido del humor, esencial para ser youtuber y soltar joyitas como: «He empezado a hacer paddle surf y origami. No al mismo tiempo, ¡sería complicado que el papel estuviera seco ya que me caigo todo el rato!”. ¡Brava ella!

Barbie se hace vblogger

 

9. No tiene problema en cambiar de look: de hecho, en su segundo vídeo lo demuestra luciendo su perfecta melena rubia tintada a mechones con tizas rosas (lo que igual no sabe es que esas cosas te dejan el pelo perfecto para fregar una vajilla entera con él… esperamos que también sepa de aceites milagrosos).

10. Venga, en serio, ¿quién no ha querido ser Barbie en algún momento de su vida?