En tu cabeza, el mapa tenía el camino perfectamente trazado: terminaste tus estudios hace tiempo, has encadenado beca tras beca, te has pasado ya un par de años sin tener unas vacaciones como dios manda y has conseguido algún que otro trabajo serio. Y claro, todo esfuerzo tiene su recompensa, y con un currículum como el tuyo, estabas ilusionada porque acababas de vislumbrar un posible destino laboral bien definido al final del trayecto que llevas recorriendo desde hace tanto tiempo…

Happy-gif
En tu mente el plan de vida sonaba muy bien. ¿Demasiado bien?

Sin embargo, hoy te has visto obligada a echar el freno y, sobre esa imagen en la que ya te veías estrenando tarjeta de visita, ahora luce un enorme tachón bajo el que aparecen las palabras que han puesto punto y final a tus intenciones de conseguir el trabajo soñado: “Lo sentimos, pero no eres la persona que buscábamos para este puesto”. Un simple y claro ‘no’. O lo que es lo mismo: te han rechazado.

«¿Y ahora qué?», te preguntarás. A fin de cuentas, es solo un trabajo, ¿verdad? Pero a ti este rechazo te está haciendo sentir tan mal como cuando aquel chico de 3ºB que tanto te gustaba se lió con otra delante de ti. Y es que, no es lo mismo que te de calabazas un lío pasajero que el que tú pensabas que podía ser el amor de tu vida. Y con un trabajo en el que habías puesto todas tus esperanzas de ser contratada, pasa más o menos lo mismo, que comienzas un pequeño vía crucis que pasa por las siguientes fases:

El muy desalmado de George Clooney se dedicaba a despedir a gente de empresas en 'Up in the air' (2009).
El muy desalmado de Ryan Bingham (George Clooney) se dedicaba a despedir a gente de empresas en ‘Up in the air’ (2009).

1. Shock

En tu cabeza se produce una especie de cortocircuito que no te permite entender exactamente qué ha pasado. “¿Cómo? ¿Qué significa que no soy apta para el puesto?”.

Naturalmente, significa que han pasado de ti, que no te contratan, que no te quieren en la empresa, que no eres lo que buscaban… Es una frase bastante obvia, pero ahora mismo no eres capaz de procesarla, porque no encuentras un porqué. Así que es cuestión de segundos que pases a la siguiente fase.

2
“¿Cómo? ¿Qué significa que no soy apta para el puesto?”.

 

2. Negación

“NO PUEDE SER”, te dices a ti misma.
“Seguro que se han equivocado”: no, no se han equivocado.
“Pero si soy la candidata ideal”: pues al parecer Recursos Humanos no te ha considerado lo suficientemente ideal para el puesto.
“Es imposible que se hayan leído bien mi currículum y mi carta de presentación, y que me hayan descartado”: a ver cómo te lo explicamos…
“Creo que voy a volver a llamar para decirles que se han equivocado. Seguro que se lo piensan mejor”.

A ver, no, para. Ni llames, ni escribas, ni presiones, ni nada. Te han dicho que no. Y no hay nada que cambiar.

3
«No puedes hablar en serio».

3. Enfado
Ahora que has asumido que te han dicho que no y que no hay ninguna equivocación, es cuando empiezas a soltar tacos por esa boquita al estilo más barriobajero (que conoces bien).

¡Es que es increíble que te hayan dicho que no!: «¿Pero quién se ha creído esta gentuza? ¡Yo que soy la tía más trabajadora del mundo, la más cualificada para el puesto! ¿A qué enchufado de m****a han puesto en mi lugar? ¿Quién es el imbécil que ha tenido la indecencia de rechazarme? ¡Seguro que no han puesto ni un mínimo de interés en leer alguno de los chorrocientos trabajos que he enviado como ejemplo de mi labor! ¿Acaso quien ha hecho la selección final tiene experiencia suficiente para esto? ¡En esa empresa no tienen ni p**a idea! ¡VAYA PANDA DE G********S! ¡OJALÁ SE VAYAN A PIQUE! ¡DESGRACIADOS! ¡MISERABLES! ¡%$HDF&/NFU83!»…

tumblr_mdwwro8XDx1qabvnyo1_400
«¿Pero quién se ha creído esta gentuza?».

4. Tristeza
Ya has soltado toda barbaridad que se te ha ocurrido y parece que estás más relajada. Pero el lugar que antes ocupaban las palabrotas, ahora está empezando a inundarse de una sensación bastante más desagradable: el (clásico) bajonazo.

Im-so-Shocked-GIF
Tras el enfado llega… ¡el bajón!

Porque ahora estás empezando a reaccionar, y una capa de tristeza empieza a envolverte. Jo, es que no te han cogido. Y era un trabajo que te hacía mucha ilusión conseguir. Menudo palo. No vas a poder alcanzar esa meta que te habías marcado. Esto cambia todos los planes que tenías en mente ,y claro, ahora mismo te sientes perdida.

Rachel_shocked_by_Brittanys_comment
¿Te sientes perdida?

5. Cuestionamiento
¿Y ahora, qué? Es una pregunta que te vas a repetir una y otra vez. “¿Qué hago? ¿Vuelvo a intentarlo en otra empresa similar? Pero si no me han cogido en esta, ¿por qué me van a coger en otra? ¿Y si vuelvo a recibir un ‘no’? ¿Quizá esto quiera decir que mejor me quede como estoy? ¿Pero y cómo voy a estar toda la vida en un trabajo que no me gusta? ¿O será que no sirvo para esto?”.

Tu diálogo interior puede ser infinito, y sembrará un mar de dudas que te harán replantearte todo aquello que dabas por hecho y por correcto. Por si no era suficiente con la patada en el culo…

153150-minions-kicking-football-gif-I-D6TP

 

6. Autocrítica
Esta parte es la que también se conoce como la flagelación, la del autocastigo, la del “la madre que me parió, si es que soy un desastre, no sirvo para nada y voy a morir pobre e indigna”.

Es una fase que vas a pasar, pero te recomendamos transitar muy, muy rápido, porque vas a poner en duda tus capacidades y ¡chata! eso sí que no. Un ‘NO’ no significa que no te hayas currado la entrevista o que no sirvas para ese trabajo, o cualquiera de las pegas que te estés planteando ahora. Es solo un ‘no’. Uno. Aunque es muy probable que mueras pobre, pero como el 99% de la población.

tumblr_inline_ntczl30kMk1su4kc2_500
«No sirvo para nada y voy a morir pobre e indigna».

7. Aceptación
Se acabó el llanto, la autocompasión, la rabia y la autocrítica. Es hora de que aceptes que es verdad: no te han aceptado en esa empresa que tanto te llamaba la atención. Quizá porque había alguien mejor que tú o, simplemente, porque no les has gustado. Pero no pasa NADA. No es el fin de mundo y sabes de sobra que hay cosas bastante peores que sufrir un pequeño bache en el camino. Además, ¿a ti quién te asegura que la vida en ese trabajo iba a ser tan bonita como tú te la imaginabas? ¿Y de verdad te merece la pena seguir haciendo castillos en el aire con lo que pudo ser y no fue? Por favor, basta de dramas.

tumblr_nki7d8RTcO1tpddfio1_500
#StopDramas

8. ‘Move on’
Una vez superado el disgusto, te vamos a decir una cosa: es posible que este no sea el último rechazo laboral que vas a recibir. Ya, ya, pasar por este bajón de nuevo le pone a una los pelos de punta. Pero chica, es la realidad. En la vida, no todo sale como una quiere.

No mientas, Bey. Todos sabemos QUE TÚ NO PIERDES NUNCA.
No mientas, Bey. Todos sabemos QUE TÚ NO PIERDES NUNCA.

Ahora bien, no todo van a ser rechazos en esta vida, y estamos convencidas de que en algún momento conseguirás lo que te propongas. Mientras tanto, solo te queda seguir currando como una cosaca e intentándolo una, y otra, y otra, y otra vez. ¡Y que la suerte te acompañe!

good-luck_zps73ed9cfa
«Nunca te rindas y la buena suerte te encontrará». Pues eso.