Moda
Muchos dirán que este es el efecto de Demna Gvasalia y su colectivo Vetements. Pero la realidad es que este es un reflejo de lo que pasa en la cultura millennial. John Galliano se ha vuelto como una esponja y percibe a las nuevas generaciones como especies fascinantes. De ahí que su nueva propuesta para Maison Margiela Artisanal fuera trazada por aquella línea de desafío.
Un mundo virtual con personajes ficticios —el avant-garde en su totalidad— acogidos por siluetas maximalistas que desencadenan una metamorfosis extraordinaria. Es aquí donde John Galliano pinta a un ser fascinante que no propone, sino que impone su faceta rebelde ante la sociedad.
En la regeneración social, Galliano ya no busca sorprender a sus más fieles seguidores de Dior. La contrapropuesta a sus años románticos y extravagantes es precisamente su alineamiento con los valores de la maison. El concepto anti-fashion que se propagaba durante la década de los noventa con diseñadores como Yohji Yamamoto e incluso Martin Margiela, es ahora un principio radical en la haute couture.
Hemos llegado a un momento en donde la idea del savoir-faire se está diversificando para aterrizar sobre nuevos horizontes. ¿Quién mejor que Galliano para poner la muestra? Al final del camino, este es el presente que sigue reivindicándose.
*IMAGEN: Getty Images
