La mum-to-be debuta su baby bump durante un día de extensos compromisos en su gira por Australia. Meghan Markle y el príncipe Harry llegaron a Down Under en un vuelo comercial acompañados de un equipo de diez personas. Con el anuncio tan esperado del royal baby en camino, la duquesa de Sussex decidió presumir la espera de su hijo o hija con un vestido de la australiana Karen Gee —un buen tributo al país— denominado “Blessed Dress”. Pero aunque el nombre del diseño causó revuelo en las redes sociales, en realidad es el tributo a la princesa Diana lo que más nos llamó la atención.

Desde el día de su boda, Meghan no había portado joyas de Lady Di —¿aún recuerdas el anillo de aquamarina que resaltó con su vestido de Stella McCartney?—. Sin embargo, los accesorios que llevó la duquesa a juego con el diseño de Karen Gee y por la tarde con un shirt dress verde olivo plisado de Brandon Maxwell, son parte de la colección de joyería que dejó la princesa.

Se trata de un par de pendientes en forma de mariposa —la princesa alguna vez llevó con una gargantilla— y un brazalete que de acuerdo a The Court Jeweller, ambos diseños están hechos de oro con diamantes y, probablemente, detalles esmaltados.

La duquesa ha elegido dos ocasiones muy especiales para portar el espíritu de su suegra; coincidentemente en su boda y ahora que dieron a conocer la noticia del royal baby. Quizá sea la manera de Harry y Meghan Markle de mantener la esencia de la princesa presente en los momentos más importantes para ellos. ¿Veremos a Meghan llevar más piezas de joyería de Lady Di en su gira por Oceanía? Todavía quedan quince días de eventos tras eventos.

Fotos: Getty Images