El pantalón pitillo (descanse en paz) tenía provechosas ventajas a las que ya nos habíamos acostumbrado: fundamentalmente la facilidad con la que se combinaba con cualquier tipo de calzado desde sandalias planas a salones, botas, botines, peep toes, deportivas… Pero lo cierto es que el pantalón ancho (hola, bienvenido) suele ser más favorecedor para un amplio abanico de cuerpos. Para empezar, puede acoger en sus entrañas a una cómoda plataforma que alargue pierna hasta el infinito.

Pero los zapatos no son lo único a tener en cuenta a la hora de abrazar este emblema del revival setentero en el que nos adentramos en la nueva temporada. Más trucos, ideas e inspiración en las imágenes de street style de esta galería.

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