Ralph Lauren es una eminencia de la moda estadounidense. Su firma homónima lo ha posicionado como una voz indiscutible que reactiva el estilo americano temporada tras temporada. Hace seis meses, el diseñador montó una extravagante celebración en Central Park para festejar con un arsenal de celebridades, editores, compradores y familiares, su media década en la moda. Fue ahí cuando Priyanka Chopra y Nick Jonas hicieron su debut como pareja comprometida y recrearon la icónica fotografía de compromiso de su BFF, Meghan Markle con quien era su fiancé en ese momento, Prince Harry.

Pero de regreso al presente, para SS19 —recordemos que Ralph Lauren sigue siendo de los pocos diseñadores que presentan en modalidad see-now-buy-now— el neoyorquino presentó una oda al viejo glamour, pero aún muy relevante, de la época dorada de Hollywood y lo combinó con el movimiento feminista del presente. Fue como si Marilyn Monroe hubiera resucitado y usado ese vestido de lamé dorado en Gentlemen Prefer Blondes una vez más —en la propuesta de Lauren, Bella Hadid lo llevó—. Una mujer poderosa y fuerte con guiños al genderless porque, ¿qué es de una colección en estos tiempos sin esa línea de género que cada vez se borra más?

Pensemos en un sueño americano sin precedentes y en donde la mujer evoluciona sin complicaciones. Algo así como una película de Hollywood —ahora la realidad está siendo inspirada en las fantasías—. Cada atuendo desfilado por la pasarela de Ralph Lauren esta mañana lo tenía tatuado de pies a cabeza. Los power suits, ahora un distintivo social femenino que identifica al movimiento sufragista actual —recordemos hace unos días cómo las demócratas de los Estados Unidos tomaron el State if Union en trajes blancos— estaban ahí en las distintas presentaciones. Un tux que concluye en abrigo; un jumpsuit con todo el corte de un traje sastre.

Por otro lado, los sueños más glamurosos fueron concedidos con aquellas prendas doradas, tan poderosas como para la mujer que sale de fiesta cada noche. Y, en tiempo con la award season, vestidos dignos de seguir apoyando #TimesUp, pero que a la vez respetan esa elegancia inaudita que refiere a Hollywood.

Medio siglo después, Ralph Lauren sigue siendo el epítome del estilo americano.

*IMAGEN: Cortesía de Ralph Lauren